Por segundo año consecutivo la Universidad Gabriela Mistral junto a Fundación Honra realizaron el Congreso Internacional de Psicología UGM 2023, en donde expertos nacionales e internacionales se reunieron para hablar sobre la realidad a nivel transversal del ecosistema educativo y la violencia que se vive en estos espacios.
Ambas instituciones se han comprometido en potenciar el rol de la prevención de las comunidades, colaborando con la concientización y la problematización de las violencias.
“Prevención y abordajes de las violencias en espacios educativos” se denominó esta segunda versión del congreso internacional, y que contó con la participación del Rector UGM Sergio Mena; de la Subsecretaria de Educación, Alejandra Arratia, y de la Directora Ejecutiva de la Fundación Honra, Ingrid Segura.
En la apertura del congreso, el Rector Sergio Mena afirmó que “para nuestra Universidad es clave potenciar los espacios de encuentro y reflexión sobre la violencia en los espacios educativos en que participe la academia y las instituciones público-privadas. Como la primera Universidad privada no tradicional buscamos aportar al rol de la prevención al interior de las instituciones y con sus comunidades, colaborando con la concientización y la problematización de este realidad”.
La Subsecretaria de Educación, Alejandra Arratia, señaló que “quiero agradecerles por juntarse a conversar y a trabajar este tema que es tan importante para la educación en nuestro país. El tema de las violencias y cómo las abordamos desde la perspectiva formativa educativa es muy importante para nuestro Ministerio de Educación y para nuestro Gobierno. El Presidente nos ha encargado que podamos trabajar para una educación que permita que todas y todos desarrollen el conocimiento y la felicidad, y para eso es fundamental abordar decididamente el problema de las violencias”.
Fundación Honra, que lleva más de diez años trabajando en la prevención educativa de las violencias, a través de su Directora Ejecutiva, Ingrid Segura, señaló que “lo principal es intervenir y entender cómo es la dinámica de los jóvenes, las niñas y los niños. Sólo de esa manera podremos entregarles las herramientas necesarias para que logren desarrollar una buena convivencia”.
En el primer módulo sobre prevención de violencia en espacios educativos y educación socioemocional expusieron el psicólogo y académico de Psicología UGM, Iván Salas; la Directora Social de la Fundación Portas, María José Juárez; además de las expertas Teresita Marchant, psicóloga UC, Magíster en Dirección y Gestión Escolar de Calidad e integrante de la Junta Directiva UGM; Cristina Fuentealba, psicóloga del equipo psicosocial de convivencia escolar del Liceo Experimental Manuel de Salas, y Ángela Morales, Jefa de Unidad de Género de la U. Central.
Abordaje de la violencia en contextos educativos fue la temática del segundo módulo del congreso y que contó con las presentaciones de Mariana Gil, Directora de la Oficina de Defensoría de los Derechos de la Infancia de México; de la Decana de la Facultad de Ciencias Sociales, Jurídicas y Humanidades, Magdalena Fernández; de Lidia Huguet, profesora del Institut Escola Trinitat Nova, de Barcelona España, y de Xavier Oriol, profesor investigador distinguido Beatriz Galindo en el Departamento de Psicología de la U. de Girona en España.
En el año 2022 la Superintendencia de Educación recibió 12.052 denuncias por problemas de “convivencia” al interior de los colegios chilenos. De ellas, 5.108 corresponden a “maltrato entre estudiantes” y 2.285 a “maltrato de adulto a párvulo y/o estudiante”. Las cifras son preocupantes, sobre todo si se considera que -en comparación con el año anterior- las denuncias por convivencia aumentaron siete veces (hubo 1.586 en 2021).
En ese contexto resulta imprescindible generar espacios de sensibilización y prevención. El 2º Congreso Internacional de Psicología de la Universidad Gabriela Mistral -que contó con más de 1.200 inscritos y la participación de expertos de España, México y Chile- relevó que la violencia no puede ser legitimada como una forma de resolver los conflictos.
La panelista María Cristina Fuentealba, Magíster en Psicología Clínica y psicóloga del Liceo Experimental Manuel de Salas, puntualizó que “con la jornada completa los niños pasan muchas horas en la escuela, por lo tanto, deberían tener recreos más largos y actividades dirigidas precisamente a mejorar la convivencia. También existe una deuda enorme con los docentes y otros profesionales de área que están a cargo de los menores: la actualización curricular en la formación que reciben en salud mental y emocional. Hay que capacitar a la comunidad escolar en primeros auxilios psicológicos”.
Su visión coincide con la de otros expositores. “No hay que perder de vista que estamos viviendo un nuevo contexto socioemocional. La comunidad educativa debe priorizar la salud mental y crear vínculos. Hay que replantear la manera de formar a los formadores”, dijo Teresita Marchant, Psicóloga y Magíster en Dirección y Gestión Escolar de Calidad.
La segunda versión del congreso estuvo dirigida especialmente a docentes, encargados de convivencia escolar, apoderados y estudiantes, quienes tuvieron la posibilidad de realizar comentarios y preguntas a los expertos. Una de las interrogantes que más se repitió fue qué hacer para evitar la violencia en los espacios educativos.
Desde España, Xavier Oriol, Doctor en Psicología, Psicopedagogo y Educador Social de la Universidad de Lleida, dio cuenta de algunas intervenciones que han dado resultados en su país. “Suena básico, pero los programas para el fomento de la amabilidad y la simpatía durante las primeras edades están mostrando efectos sumamente efectivos para minimizar las acciones violentas. En los estudiantes adolescentes estamos abordando con fuerza el uso inadecuado de redes sociales y lo que llamamos `presión grupal´. Para los jóvenes es importante ser parte de un grupo y -para conseguirlo- a veces no se comportan como debieran, sino como los otros esperan. Esa presión también tiene efectos -a veces- negativos”, señaló el profesional español.
En Chile, también se han realizado esfuerzos para generar espacios educativos seguros y basados en el respeto. “Desde el Ministerio de Educación se ha apoyado a las escuelas para desarrollar habilidades en profesores y alumnos en pro de una buena convivencia. Sin embargo, también hay que desarrollar un trabajo importante con las familias. A veces, hay muchas carencias, como figuras maternales o paternales inconsistentes, y eso también genera consecuencias en el comportamiento de los niños”, aseguró Magdalena Fernández, Decana de la Facultad de Ciencias Sociales, Jurídicas y Humanidades de la Universidad Gabriela Mistral.
Identificar las causas o factores de riesgo, diseñar las intervenciones y evaluar posibles soluciones es lo mínimo que se debe considerar al momento de crear un plan de convivencia que resulte efectivo. “Esta es una situación alarmante que se está viviendo prácticamente en todas las escuelas de Latinoamérica. Debemos hacer todos losesfuerzos para que los niños tengan un mejor bienestar y desarrollo”, dijo Mariana Gilberto, abogada y Directora de la Oficina de Defensoría de los Derechos de la Infancia, con sede en Ciudad de México.
Los efectos pueden ser profundos y duraderos. Por eso resulta relevante la reflexión que realiza la academia, la sociedad civil y las instituciones públicas y privadas con respecto a esta problemática. Las instituciones -además- deben seguir interviniendo.
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Congreso Internacional de Psicología UGM 2023: - O el canal de Youtube @ugmistral
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Módulo 1 Congreso Internacional de Psicología UGM 2023:
Módulo 2 Congreso Internacional de Psicología UGM 2023: