El miércoles 29 de junio se realizó en el Auditorio de la Casa Central de la UGM un conversatorio con foco en temáticas sobre democracia, institucionalidad y respeto a los Derechos Humanos, que contó con la participación especial de Carolina Barrero.
La joven cubana de 35 años es Licenciada en Historia del Arte de la Universidad de La Habana, y MBA en Instituciones Culturales, de la Universidad Complutense de Madrid. Tiene una destacada carrera profesional y académica en el mundo del arte y la cultura, llegando a ser la curadora de la Bienal de La Habana. Está vinculada al movimiento 27N, que reúne a un grupo de artistas, cineastas y periodistas que aboga por libertad de expresión y fin a la censura en la isla. Hoy vive como exiliada en España, y recientemente participó en la Cumbre de las Américas sosteniendo reuniones con representantes de diversos países.
Tras esa cita internacional, fue invitada a Chile por la Fundación Patricio Aylwin con una agenda que consideró reuniones con una diversidad de grupos, y además sostuvo un conversatorio en la Universidad Gabriela Mistral junto a académicos y colaboradores.
Esta instancia contó con un panel que acompañó a la Licenciada en Historia, compuesto por Mariana Aylwin, Presidenta de la Junta Directiva UGM; Sergio Mena, Rector de la Casa de Estudios, y Gabriel Salvia, Director General del Centro para la Apertura y el Desarrollo de América Latina (CADAL).
En la introducción al conversatorio, el Rector Mena reflexionó en que “los Derechos Humanos han sido la bandera de lucha de un sector político, particularmente en nuestro país, y se ha apropiado de alguna manera del concepto. Pero la verdad es que los Derechos Humanos no son ni de izquierda ni de derecha, los Derechos Humanos son de las personas”.
Durante el conversatorio, Carolina Barrero se refirió al contexto social y político en Cuba, a la búsqueda de participación de los estudiantes universitarios, a las vivencias como alumna de la Universidad de La Habana y su proceso de expatriación en España. Además, recogió consultas y comentarios de los presentes, profundizó en el rol de la tecnología y redes sociales, y en la relevancia de los valores democráticos.
Al finalizar el encuentro, Carolina Barrero comentó que “ha venido mucha gente preocupada por el tema de Cuba. Eso me llena de esperanza, me hace pensar también en qué bueno sería tener un día allá, en espacios universitarios, discusiones como ésta, discusiones sobre Derechos Humanos, participación política y pluralismo, especialmente en el espacio de la academia, que es el espacio de la crítica”.
Al referirse sobre el valor de la libertad en la sociedad, la defensora de los Derechos Humanos señaló que “la libertad y la democracia nunca se pueden dar por garantizados, siempre son un ejercicio en continua construcción y en continuo cuestionamiento. La democracia, por ejemplo, no significa solamente poder votar y tener pluripartidismo político. Es algo más profundo, que está en la cultura de las naciones y de los ciudadanos. Es un proceso que también se adquiere a partir de hábitos. No puede haber democracia con corrupción. Creo que la corrupción, por ejemplo, es uno de los problemas de toda la región. No puede haber democracia sin debate público, la polarización, la extrema polarización, la frivolidad y la cultura del espectáculo, también atentan contra los valores y los principios de la democracia”.
Barrero agregó: “no duden en poner en el centro de lo político a los Derechos Humanos. Y, en segundo lugar, a los principios y valores de la democracia por encima de los intereses políticos, del pragmatismo político y económico. No deben ser los intereses económicos los que primen, los que guíen las decisiones políticas, sino los Derechos Humanos”.
Mariana Aylwin, Presidenta de la Junta Directiva UGM, señaló que “una universidad tiene que abrirse a conversar, a mirar el mundo más allá de nosotros mismos, a conocer la realidad de nuestro continente, de nuestro país. De las cosas que están pasando y de cómo podemos contribuir en los valores en los cuales se funda una universidad: el valor del conocimiento, de la verdad, de aprender a tolerarse, de aprender el respeto a las distintas ideas”.
